¡Hola, Behind Gaming! Soy Rigo Domínguez, y como cada semana espero que la estén pasando muy bien. Y si no es el caso, no pierdan el ánimo: siempre existirá la oportunidad de que vengan tiempos mejores. Como ya se la saben, si es que son fieles lectores de este medio, vengo a compartirles una reseña de un título que pueden jugar en Nintendo Switch. En esta ocasión, se trata de Die After Sunset. ¿De qué va? Y lo más importante, ¿está bueno? Vamos al análisis.
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Teniendo a PQube como su distribuidora y a PlayStark como la desarrolladora, nos llega Die After Sunset, un shooter al estilo roguelite con vista en tercera persona, cuya característica principal que lo distingue de otras opciones similares, es su mecánica entre luz y oscuridad, en una aventura a través del tiempo en donde la tierra es atacada por unos seres extraterrestres llamados murkors, siendo nuestro deber liderar la resistencia.
Tenemos a tres personajes jugables a elegir: April, con su pistola; Rido, con un rifle automático; y Hune, un experimento fallido de los murkor. Al comenzar, tenemos un tutorial que nos enseña nuestros movimientos básicos, incluyendo el doble salto, las diferentes armas a distancia y cuerpo a cuerpo, así como las habilidades que requieren de un medidor de cooldown. Sin embargo, debido a que jamás se nos explica cuál es nuestro objetivo, al momento de empezar a jugar resulta un poco confuso.
Lo que hay que hacer es mejorar a nuestro personaje para pelear contras los jefes. Esto lo logramos al encontrar cofres en cada escenario, unos amarillos que dan ventajas bastante regulares, o unos rosas, con mejoras más buenas. Conseguirlos tiene su reto, ya que están resguardados por unos cuantos enemigos que se reproducen.
Complementando lo anterior, tenemos los desafíos, los cuales van desde eliminar a enemigos de una zona o proteger cierto espacio, así como otros en los que no siempre es tan obvio lo que debemos hacer. Como buen roguelite, las muertes son una constante y nos dan un avance en el juego.
En teoría, los enemigos son más fuertes en la oscuridad que en la luz. En la práctica, la diferencia es difícil de percibir, ya que pareciera que nuestras armas no son tan efectivos incluso en las áreas iluminadas.
Parte del atractivo de los roguelites, es ir consiguiendo mejoras que te hagan más fuerte frente a los enemigos. Aunque aquí las tenemos, la realidad es que los powerups no se sienten tan poderosos. Es como si nunca fueran suficientes en contra de los enemigos y apenas si les hacemos cosquillas.
Conclusión
Siempre me gusta buscar el lado positivo a los juegos, y en general a cualquier cosa, pero con Die After Sunset es complicado. Me gusta la premisa, pero jugarlo me resultó muy poco divertido, ya que en general se siente muy desbalanceado en favor de los enemigos. Y no es que no me gusten juegos difíciles, es simplemente que aquí el juego no se siente que esté siendo “justo” con nosotros. Y tampoco es cosa de mejorar nuestro arsenal, ya que los upgrades se sienten mínimos, nunca suficientes.
Calificación
Y listo, hemos llegado a la conclusión de la reseña de esta semana. Como siempre, muchísimas gracias a Behind Gaming por el espacio, y por ser un medio que continúa brindándole la atención que se merecen a los juegos desarrollados por estudios independientes. Hay muchas joyas por ahí sin tanto reflector, y es bueno saber que alguien está en busca de ellas. ¡Hasta la próxima!
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