¡Hola de nuevo, Behind Gaming! ¿Cómo les va? ¿Qué han estado jugando últimamente? Soy Rigo Domínguez, y como cada semana, entre otras cosas, yo he estado jugando un título indie en Nintendo Switch del cual les vengo a platicar. En esta ocasión, se trata de algo llamado Nova Lands. ¿De qué trata y qué tal está? Bueno, para saberlo pasemos rápidamente a la reseña.
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HypeTrain Digital como publicadora y Behemutt como desarrolladora, son las compañías encargadas de traernos Nova Lands. Es, en palabras de sus creadores, “una aventura de gestión de islas y automatización de fábricas”. Dicho de otra manera, es un simulador en el que la clave es el manejo adecuado de los recursos con los que contamos, con el “extra” de contar con enfrentamientos ante monstruos gigantes. Imagínate algo así como un Animal Crossing o un Stardew Valley, pero en el espacio y teniendo que estar cuidándonos de criaturas peligrosas.
Nova Lands comienza con nuestra llegada a un nuevo mundo –literalmente-, el cual está conformado por distintas islas y debemos explorar para recolectar recursos como piedras y madera, así como otros más extraños, los cuales nos servirán para construir nuestra base. Conforme avanzamos, visitamos nuevas islas y descubrimos más personajes (que, aunque visualmente lindos, al poco tiempo parecen más “robots” que NPC con algo de “vida”), quienes nos asignan tareas secundarias para obtener recursos, por lo que aquí entra un factor súper importante del juego: la automatización de procesos.
Esto se logra con la ayuda de pequeños robots –llamados simplemente bots-, quienes se encargan de realizar las tareas repetitivas para crear toda una industria interplanetaria eficiente. Eso sí: habrá que protegerlos bien contra posibles ataques de monstruos mientras nosotros estamos fuera explorando nuevas áreas. Ya que tenemos bien montada nuestra “fábrica espacial”, hay que construir cohetes para transportar la mercancía y así poder venderla a los habitantes de otros planetas.
Irónicamente, siendo un juego de gestión de recursos, el sistema de gestión deja mucho que desear. Manejar el inventario es tardado, ya que se necesitan múltiples acciones para seleccionar lo que queremos. El almacenamiento en nuestro inventario se limita a 100 por unidades en los 4 huecos de los cofres, lo cual te quita un poco –o un mucho- las ganas de explorar para buscar más materiales. ¿Para qué si no puedes cargarlos, o si puedes, tendrás que regresar para durar un rato acomodando todo? La interfaz general del juego tampoco es muy amigable que digamos.
Aunado a ello, esta la presión del tiempo. Siendo un humano en el espacio, necesitamos oxígeno, el cual se va consumiendo obligándonos a regresar constantemente y muy pronto a la base por más. Esto, en teoría, tiene todo el sentido del mundo. En la práctica, hace que sea menos divertido y tedioso.
Pasando a la parte de los combates frente a monstruos, aquí tenemos dos opciones: elegir el camino de la violencia y utilizar nuestra pistola; o resolver un puzzle especial. La decisión depende enteramente de nuestra forma de juego, ya que la recompensa al final es la misma: materiales raros y skins para nuestro personaje. La única diferencia, es que si elegimos el puzzle podemos conocer un poco más del monstruo que tenemos ante nosotros.
Visualmente, el estilo presenta un pixel art muy lindo y bien trabajado, otorgándonos un mundo muy colorido con cada isla presentándonos fauna, flora y ambientaciones distintas. En cuanto al sonido, siento que en este tipo de juegos es fundamental ofrecernos una banda sonora agradable y tranquila, lo cual por fortuna está presente en este título. Pienso que no es nada para resaltar en ese sentido, solo cumple su cometido.
Conclusión
Nova Lands es una propuesta bastante interesante como simulador de gestión de recursos. Visual y auditivamente tiene su encanto y la opción de poder combatir contra monstruos usando nuestra pistola o resolviendo puzles me gustó bastante. Lamentablemente, es precisamente debido a su sistema de gestión por lo que no puedo recomendarlo, ya que le resta bastante a la experiencia al ser muy limitado y poco o nada intuitivo. Las ideas están ahí y son buenas, pero pudo ser mucho mejor por ese único pero significativo problema.
Calificación
Y eso es todo, hemos llegado al final de la reseña de esta semana. Como siempre, muchísimas gracias a Behind Gaming por el espacio, y por ser un medio que continúa brindándole la atención que se merecen a los juegos desarrollados por estudios independientes. Hay muchas joyas por ahí sin tanto reflector, y es bueno saber que alguien está en busca de ellas. ¡Hasta la próxima!
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